El pasado viernes, Olga, cantante lírica y voluntaria de la asociación, nos ofreció la segunda audición comentada del otoño: el Réquiem, de Gabriel Fauré, interpretada por Dietrich Fischer y Victoria de los Ángeles.
Gabriel Fauré, nacido en Pamiers, Francia, en 1845 y fallecido en 1924 en París en 1924, era músico y pedagogo y fue uno de los compositores franceses más destacados de su generación. Nombrado director del Conservatorio de París en 1905, dimitió en 1920 a causa de su sordera adquirida con el paso de los años. Su Réquiem es inusual porque es tranquilizador, tierno y liberador, a diferencia de otros que ponen el acento en el dramatismo, el juicio final y la oscuridad. Es considerado por muchos una “canción de cuna sobre la muerte”.
En palabras de Fauré, “la música existe para elevarnos tan alto como sea posible por encima de la existencia diaria”.