Tuvo lugar en el Espacio Luzarra de Deusto un evento compuesto de dos micro-charlas que versaron sobre dos mujeres geniales: Elisabeth Kübler Ross y Jane Goodall.
Elisabeth Kübler Ross nació en Zurich en 1926. Siendo una jovencita se alistó en el grupo “Voluntarios por la paz” y se fue a trabajar a Polonia. Allí visitó el campo de concentración de Majdanek y se quedó intrigada con la cantidad de mariposas que dejaron pintadas en los barracones los presos.
Revolucionó la medicina hospitalaria al tratar a los moribundos de una manera más natural y humana. Finalmente comprendió el enigma de las mariposas, que al igual que el ser humano a la hora de la muerte deja su cuerpo, ellas dejan su capullo de seda.
También descubrió las cinco fases del duelo que ayudan a superar la pérdida: negación, ira, negociación, depresión y finalmente aceptación.
Jane Goodall, la embajadora del mundo animal. Enamorada de Tarzán de los monos, con 22 años viajó a Tanzania. Allí convivió con los chimpancés y estableció lazos de amistad con ellos. Les puso nombres y les dotó de una identidad.
Demostró que tienen emociones y luchó por mejorar sus condiciones en las jaulas cuando son utilizados para experimentos. Abolió la creencia científica de que solo los humanos utilizan herramientas.
Fundó el instituto Jane Goodall Raíces y Brotes para acercar a la gente y en especial a los niños al mundo de los animales.
Admirada y reconocida en todo el mundo Jane Goodall convence, no con argumentos, sino contando historias que forman parte de su vida y de su experiencia y que llegan al corazón de la gente.