Espacio Alejandría dedica el Día Mundial de la Filosofía al misterio de la reencarnación.
La jornada del pasado 22 de noviembre de 2024 de “tardeo filosófico”, con motivo del Día Mundial de la Filosofía, ha consistido en una serie de micro charlas y diálogo abierto en torno a la reencarnación como hilo conductor.
Durante la sesión, los ponentes de la organización han realizado un recorrido por diversas tradiciones filosóficas y culturales que han reflexionado sobre el misterio de la vida más allá de la muerte física.
Las dos primeras intervenciones han ofrecido un marco conceptual sobre el carácter cíclico de la naturaleza, organizada sobre la base de ciertos patrones de repetición. En este sentido, la vida humana supone un reflejo a pequeña escala de dichos patrones cíclicos o leyes del macrocosmos. Dentro de este marco, podría concebirse la reencarnación como una ley de la naturaleza en la que la humanidad estaría sujeta a un proceso de mejoramiento continuo.
A continuación, se ha presentado un mosaico de interpretaciones acerca del misterio de la transmigración desde varias corrientes de pensamiento. La teosofía de H. P. Blavatsky propone que al plano corporal y material le sobrevive el ser esencial, sujeto a las leyes del karma individual y colectivo. La filosofía estoica defiende la aceptación de la muerte como paso previo para cultivar las virtudes y elevar el alma. Desde el budismo tibetano, el impulso de renacer se explica por no haber alcanzado el despertar absoluto en la vida corpórea. Además, algunos cuentos de Andersen como “El lino”
sugieren un simbolismo en torno al renacimiento cíclico de la vida.
También ha habido ocasión para una mirada científica del asunto a partir de los estudios sobre experiencias cercanas a la muerte (ECM). Pese a las habituales desacreditaciones de los escépticos, los múltiples testimonios recogidos por investigadores como Kenneth Ring indican unas mismas constantes que otorgan consistencia a este fenómeno.
Siguiendo este hilo, la última intervención ha sostenido que ya en el “mito de Er” de Platón se narraban las revelaciones obtenidas a través de una ECM, en consonancia con las ideas del filósofo acerca de la inmortalidad y la transmigración de las almas.
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