Otro año más, los voluntarios de Nueva Acrópolis en Barcelona que participaron en el reparto de comida del día de Reyes hicieron posible que decenas de personas que viven en las calles de la ciudad reciban alimento y un poco de compañía acogedora.
“No hay nada como la sonrisa y la mirada de agradecimiento”. En sus relatos, los voluntarios reconocieron que se aprende mucho con estos actos de generosidad, aunque sean pequeños.