En noviembre dieron comienzo las clases de la Escuela del deporte de Nueva Acrópolis en Valencia. Siguiendo un método gradual y divertido –intentando a toda costa evitar las temidas agujetas–, el curso propone un enfoque desenfadado para lograr ponerse en forma con una serie de ejercicios, algunos de ellos al son de la música, que fortalezcan músculos y articulaciones, y mejoren la coordinación motora. A lo largo de una hora, queda además tiempo para realizar estiramientos y lograr una relajación activa. Algunas de estas sesiones se realizan al aire libre, en parques y jardines, para conseguir una mayor oxigenación.