Ciclo de micro-charlas sobre 4 grandes mujeres de diferentes momentos históricos: Hipatia de Alejandría, Hildegarda de Bingen, Artemisia Gentileschi y Helena P. Blavatsky.
Hipatia nació en Alejandría a mediados del siglo IV y fue una filósofa y maestra neoplatónica que destacó por su entrega a la filosofía y la enseñanza. Realizó importantes aportaciones al campo de las matemáticas, la geometría, el álgebra y la astronomía. Murió a manos del obispo Cirilo y sus seguidores, quienes no aceptaban la importancia que tenían sus enseñanzas sobre algunas personas influyentes de ese momento.
Hildegarda de Bingen, también conocida como la sibila del Rin, fue una fascinante mujer que nació en Alemania en el año 1098. Desde pequeña, fue educada en la religión cristiana y a la edad de 38 años llegó a ser abadesa. Fue una mujer muy culta, inteligente y con talento. Compuso obras musicales y escribió libros recogiendo sus conocimientos y experiencias.
Artemisia Gentileschi vivió en la Italia renacentista. Era la hija del pintor Orazio Gentileschi, de quien adquirió la pasión por la pintura. Fue la primera pintora en ingresar a la Academia de las Artes y del Diseño de Florencia, hasta entones sólo reservada para hombres. A los 18 años de edad, su vida cambió cuando fue violada por un pintor que trabajaba con su padre. A partir de ese suceso, sus obras empezaron a reflejar su dolor interno. El arte, como medio de expresión, le ayudó a superar sus dificultades. Con el tiempo, sus obras se han valorado por su talento artístico y expresividad.
Helena P. Blavatsky nació en Rusia en 1831. A temprana edad, destacó por su carácter rebelde e indómito, así como por su gran inteligencia y sensibilidad. Dedicó su vida a recopilar y transmitir las enseñanzas de los grandes Maestros, para lo cual tuvo que viajar mucho por el mundo y superar muchas pruebas. En el año 1875, fundó la Sociedad Teosófica, institución encargada de recoger y publicar los conocimientos sobre antiguas ideas filosóficas y teosóficas. Durante sus últimos años, escribió la Doctrina Secreta, que lleva como lema: “No hay religión superior a la verdad”.
A pesar de que han existido muchas mujeres que han destacado en muchos campos, como estas 4 mujeres, normalmente sus aportaciones no son conocidas para la mayoría. Sin embargo, actividades como ésta recuerdan que las mujeres tienen el valor y la fuerza suficiente para hacer historia.