Katy Oña, en esta conferencia, ha relatado como desde tiempos muy antiguos los dioses han servido de inspiración a los seres humanos para lograr grandes y mejores hazañas. En Egipto tenemos a la Diosa Sekhmet, patrona y protectora de los médicos. Ella es la que causa las enfermedades, pero la única que posee el remedio para curar. Cuando se consigue apaciguarla otorga el vigor y la energía para vencer la debilidad y la enfermedad.
En Grecia nos encontramos con Hygea, esta diosa es la preservadora de la energía vital. Hygea es higiene, centro, eje y purificación. Para los griegos hygea es la contrarparte en lo inferior de la armonía y la salud en lo superior, es decir la justicia. La salud para las civilizaciones antiguas consistía en armonia, equilibrio, en estar en el centro, para ello es necesario obedecer las leyes de la naturaleza, por tanto cuando no hay justicia es cuando entra la enfermedad.