En esta ocasión se analizó la palabra filosofía. Está compuesta de dos raíces griegas: filos amor y sophos sabiduría, es decir, amor a la sabiduría. El ser humano nace con esa ansia de saber que surge del asombro al contemplar la vida y sus misterios.
Es cierto que la verdad se puede buscar a través de muchos y variados caminos, pero Platón advierte que estos deben estar construidos con los adoquines de la justicia el bien y la belleza.
Aunque hoy en día ha perdido su esencia, para los antiguos la filosofía era un modo de vida, ya que pensamiento, sentimiento y acción iban juntos. Trataban de vivir según pensaban. Así cuando a Pitágoras le llamaban sabio decía que no, que él era un filósofo, es decir un amante de la sabiduría.
Por lo tanto, en esta época actual de confusión sería conveniente ponerse a caminar y siguiendo los pasos de los antiguos maestros buscar la verdad y no conformarse con las apariencias.