El Espacio Luzarra inauguró un nuevo formato de reunión llamado Té-Cuento. Alrededor de una taza de té o infusiones varias acompañadas de dulces caseros, los asistentes se reunieron para conversar de temas trascendentes propios de la psicología humana y departieron sobre el tema propuesto: La Cordura.
¿Cuántos conflictos se podrían evitar tanto a nivel individual, colectivo o circundante poniendo un poco de sensatez en la vida? Y es que normalmente, cuando se piensa que el mundo va mal, se mira de reojo a los demás. ¿Y si empezase cada uno a investigarse a sí mismo?
Entre estas y otras intervenciones se intercaló la lectura de poesías, un fragmento del cuento del Principito, y no faltó quien compartió su experiencia en la que con tan solo un poco de calma sacó de un apuro a una familia.
Para finalizar la velada, se propuso a todos los asistentes un juego: el primero empieza escribiendo una frase y los demás continúan escribiendo la suya pero sólo pueden ver la frase que ha escrito el anterior.
He aquí el resultado de la improvisación:
LA CORDURA
¿Cuál es el sentido de la vida?
Descubrir la finalidad de la vida aporta cordura, porque nos da una dirección en la vida, hacia la cual caminar. Cuando uno camina hacia la dirección correcta encuentra la coherencia interna. Uno se alinea. Y cuando me encuentro a mi misma, encuentro mi lugar en el mundo.
Todos somos iguales en esencia. Hay que buscar lo que nos une y obviar lo que nos separa. Al darnos cuenta de que todos partimos de lo mismo, de que somos una unidad, solo podremos obrar el bien.
Todos tenemos que darnos cuenta de tener la responsabilidad con uno mismo y con los demás, por lo que no sería cuerdo no ser responsable.
El sentido común es el menos común de los sentidos, por ello, para encontrar el camino se necesitan: maestros, conocimiento, sentido común y saber elegir.
Coordinemos corazón y mente para llegar a la felicidad, aunque esta felicidad parezca locura.
¡Que la sana locura nos descubra el sentido de la vida y al encontrar el sentido de la vida encontraremos la luz!
Busco mis raíces en el cielo y sigo esperando…