Nueva Acrópolis Castellón se ha sumado a la iniciativa con una actividad dividida en dos partes. En la primera, varios de los voluntarios y voluntarias de la Escuela de Filosofía expusieron diversos principios y leyes de la Naturaleza vistas desde la óptica de grandes filósofos y pensadores de varias épocas y lugares. ¿Qué pensaban los Estoicos sobre la Ley de los Ciclos? ¿Qué visión del mundo aportan las matemáticas pitagóricas? ¿Qué leyes rigen el Cosmos según la escuela de Hermes Trimegisto? Por citar algunos ejemplos.
Y, si la primera parte fue más teórica, ¡la segunda fue todo lo contrario! La tarde siguiente a la charla, tuvimos la oportunidad de ir a una pequeña parcela en un huerto urbano. Los asistentes pudieron retomar un poco de contacto directo con la tierra, algo tan necesario para el ser humano, y tan olvidado en los tiempos que corren, tan urbanitas y tecnológicos. Trabajar la tierra, se comentó, nos hace recordar que la Naturaleza sigue su propio ritmo, y que los seres humanos no debemos interferir en ese ritmo, sino adaptarnos a él.
¿Cómo se hace eso? Aprendiendo las leyes del Universo, descubriendo cuál es nuestro lugar en el ciclo natural, y aprendiendo a actuar no “a pesar de” esas leyes, sino en sintonía con ellas. Solo así podremos descubrir aquello que es común en las diversas formas de vida que tenemos a nuestro alrededor y avanzar “hacia la unidad por la diversidad”, como reza el lema que Nueva Acrópolis ha marcado para este día mundial.