Ese efímero encanto que es la vida es un título para un recital poético que tiene una particular explicación. Y se encargó de darla Diego Alonso Cánovas, poeta invitado de la Asociación Cultural Nueva Acrópolis en Almería. A los poetas les gusta, en ocasiones, presentar aparentes contradicciones ante su público. Don Diego presentó también su libro Efímero infinito, que recoge dicha contradicción, lo efímero y lo infinito. Lo efímero de la vida, un momento, y el deseo de duración, deseo de infinito. Ese efímero encanto que es la vida trae la felicidad de las cosas sencillas que a veces pasan desapercibidas.
María Dolores Gómez presentó a Diego Alonso Cánovas. Licenciado en matemáticas, fue profesor de instituto y director de IES Nicolás Salmerón y Alonso de Almería. Después se licenció y dio clases de psicología en la Universidad de Almería (UAL), donde también se doctoró. Fue profesor tutor en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Es diplomado en Magisterio. Aquella noche, sin embargo, se presentó fundamentalmente como poeta. Como hombre sensible ante las circunstancias de la vida, ante las experiencias cotidianas y más sencillas. Con algo para reflexionar, porque no le gustan todos los tópicos. Y con un grandísimo sentido del humor.
Poemas como Inventario de palabras propicias para la poesía, Felicidad, Hipermetropía, La clase de matemáticas, Espejo de emergencia, Yo somos dos, Todos en uno, Mi vida en un soneto. Don Diego estuvo acompañado musicalmente por su amigo Antonio Gallardo Ruiz, ambos de Vera, localidad del levante de la provincia de Almería. Don Antonio intercaló algunas canciones al piano: Aquellas pequeñas cosas, Sabor a mí. Terminó el recital con la conocida canción Alfonsina y el mar.
Referencias a poetas como Juan Ramón Jiménez, Manuel Machado, Álvarez de Sotomayor, León Felipe, Rubén Darío. Y un inagotable caudal de humor, con sus poemas Décima al váter, El juglar y la peste, Soneto a una calva, Soneto a un cólico nefrítico, Informe estadístico. También supo dar valor a las mujeres con un Soneto, pensar en lo trascendente y en el final de la vida con Tortuoso camino y Carpe diem para mayores de sesenta. Al término del recital tuvo el detalle de firmar ejemplares de su libro de poemas Efímero infinito, hasta agotarlos todos.
Facebook
