La sede de Nueva Acrópolis en Alicante acogió la celebración del Día Mundial de la Filosofía, que se celebra oficialmente, este año, el próximo jueves 20 de noviembre
El foro “Culturas de sabiduría: muchos pueblos, una humanidad” nos ha invitado a mirar más allá de las fronteras culturales y a reconocer que la sabiduría colectiva no está contenida en un único modelo de pensamiento, sino que florece en la diversidad de los pueblos.
La primera ponente ha sido Begoña Casas Aguirregomezcorta, Ingeniera y Doctora en Ciencia de Materiales, Filósofa y Escritora, con su ponencia titulada: “Hacia una nueva concepción de igualdad: diversidad y equidad”.
Begoña Casas puntualizaba que cuando hablamos de igualdad, nos encontramos con un desafío: con frecuencia se la ha interpretado como uniformidad, como si ser iguales significara ser idénticos. Esta visión empobrece lo humano pues niega la riqueza de las diferencias culturales, históricas y personales que nos conforman. A lo largo de la historia las civilizaciones antiguas más avanzadas como la egipcia se han esforzado por conseguir un modelo social armónico y en sintonía con las leyes de la naturaleza. También nos llegan enseñanzas del Budha, Sidharta Gautama, quién puntualizó que todos los seres humanos tenemos la misma esencia independientemente de la casta a la que perteneciesen y consideraba que se alcanzaba la sabiduría practicando la compasión por los demás seres.
En las últimas décadas, el proceso de globalización, si bien ha favorecido un mayor intercambio cultural y una interconexión más amplia entre las personas, también ha propiciado una homogeneización de las sociedades: una especie de monocultura que barre con las identidades locales y las riquezas culturales intrínsecas de cada pueblo.
Por ello, nos decía Begoña Casas, que surge la necesidad de reformular la igualdad en términos de diversidad y equidad. La igualdad auténtica no debería borrar las diferencias, sino garantizar que cada persona y cada cultura puedan aportar su singularidad a la construcción común.
La siguiente disertante ha sido Francisca Santonja Mayor, Licenciada en Derecho por la Universitat Autónoma de Barcelona, especializada en relaciones internacionales y asesora principal de Casa Mediterráneo. Su charla se ha llevado como título: “Diversidad cultural mediterránea: puentes de humanidad compartida”.
Como representante de Casa Mediterraneo, Francisca Santoja, ha explicado detalladamente la naturaleza y esencia de la institución. Casa Mediterráneo es un consorcio público integrado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación (MAUEC), la Generalitat Valenciana, los ayuntamientos de Alicante, Benidorm y Xàbia y la Diputación de Alicante.
Fundada en 2009, Casa Mediterráneo se configura como un instrumento de diplomacia pública cuyo objetivo fundamental consiste en el fomento del conocimiento mutuo y el acercamiento entre España y el resto de los países de la cuenca mediterránea, en áreas tan diversas como la cultura, la economía, el cambio climático, la igualdad de género o la innovación científica y tecnológica.
El Mediterráneo ha sido a lo largo de la historia un espacio de encuentro, intercambio y creación cultural. Civilizaciones, lenguas, religiones y tradiciones diversas han tejido en sus orillas un patrimonio común que trasciende fronteras y épocas. La ponente explicaba que Casa Mediterráneo reivindica esa riqueza plural como un recurso fundamental para el presente: la diversidad cultural mediterránea no es un obstáculo, sino un puente que conecta a los pueblos y nos recuerda que, en nuestra variedad, compartimos una misma humanidad.
La ponencia ha recuperado reflexiones de filósofos mediterráneos a lo largo de los siglos desde historiador árabe del siglo XIV, Ibn Khaldun, famoso por su influencia en diversos campos del conocimiento, como la historia, la sociología, la etnografía y la economía quien afirmaba que el fundamento de las civilizaciones es la solidaridad; pasando por Averroes, Abû Nasr Al-Fârâbî, Maimonides hasta llegar a nuestros días con la reflexión del filósofo Emilio Lledo quien nos dice que ̶ la cultura nos permite escuchar la voz del otro ̶ .
Santiago Arroyo Serrano, Doctor Internacional en Filosofía por la Universidad de Salamanca con Premio Extraordinario de Doctorado nos presentó su propuesta: “Orihuela. Sabiduría en el Mediterráneo”.
Santiago Arroyo propuso un viaje filosófico por el patrimonio cultural de Orihuela aclarando que cualquier ciudad se podría visitar desde una mirada filosófica. Orihuela, su paisaje, su patrimonio, sus tradiciones, sus gentes parecen un completo y emocionante libro abierto que nos muestra la historia del pensamiento a través de sus tesoros arquitectónicos, naturales, religiosos y artísticos donde elementos como el bien, la verdad, la justicia y la belleza, fundamentos de la filosofía platónica, se entrelazan en cada detalle.
Esta ponencia, que nos ha permitido realizar un recorrido para conocer el mundo exterior lleno de matices, nos ha lanzado a conocernos mejor a nosotros mismos, como aquel viejo emblema de la filosofía Nosce te ipsum que significa “conócete a ti mismo”.
El broche final del foro ha sido puesto por Miguel Ángel Padilla Moreno, Escritor, filósofo y humanista con “La luz de Apolo. ¿Qué es la belleza más allá de su diversidad?”
A lo largo de la historia el ser humano ha tratado de plasmar mediante sus obras artísticas su concepción de la vida, sus valores predominantes y sus creencias a través de formas nacidas de sus intuiciones estéticas. Así la historia del arte se nos presenta con tanta riqueza y variedad.
Hoy también encontramos en nuestra propia cultura múltiples tendencias estéticas, en muchos casos una “relativización absoluta” de la idea de belleza que finalmente hace que sea un reto hablar de belleza.
Miguel Ángel Padilla nos ha planteado cuestiones para reflexionar como que actualmente la belleza no goza de buena salud, o desde cuándo hay que entender la belleza, o que la belleza tiene un poder de resonancia y hay que rodearse de belleza para que resuene nuestra belleza interior.
Finalmente concluyó con una emotiva recitación de un poema de Khalil Gibran “Sobre la Belleza”.
