Hemos disfrutado de un concierto de música antigua del Ensemble Capella de Ministrers a cargo de Carles Magraner. El conjunto, formado por dos instrumentistas y una intérprete vocal, los instrumentos han sido: la viola de gamba, el laúd renacentista y la tiorba, semejante al laúd barroco pero con mayores dimensiones. También había un bailarín de danza contemporánea que aportó una visión un tanto peculiar de la actuación. Empieza el concierto y la música que suena invita a sumergirse en ella, a cerrar los ojos para apreciar mejor los matices y la sutileza con la que es interpretada. Tanto los instrumentos como la voz estaban amplificados y, sin embargo, sonaban a acústicos, con un sonido limpio y envolvente. El espectáculo titulado «A circle in the water: entre lo terrenal y lo divino» realmente nos apartó durante un momento de nuestros problemas terrenales y nos acercó a lo divino que hay en nosotros. Todos salimos del concierto con esa sensación de haber tenido una experiencia de contacto con la belleza atemporal. Pues la música que escuchamos no era de esta época, ni falta que hacía.
