Bajo las estrellas, espejo de lo Eterno, o bajo el Sol, ese ojo que ha sido testigo de toda la Historia del mundo que conocemos, es donde la Filosofía ha tenido su nacimiento y su lugar natural desde que nació.
Algunos voluntarios de Nueva Acrópolis Castellón, conscientes de esto, demostraron que no es necesario estar en un lugar con techo, bombillas de LED y aire acondicionado para reflexionar y asombrarse juntos con la Naturaleza del ser humano y de las cosas.
Así, en un arranque de originalidad (véase: retornar a los orígenes), salieron a “filosofar” a un lugar emblemático de Castellón: el Templete de la música del Parque Ribalta, donde dos voluntarios expusieron dos micro-charlas acerca de temas de interés filosófico a todo aquel que quisiera pararse a escuchar.
Una actividad diferente, en un ambiente distinto, pero con las ideas de siempre como telón de fondo.
