«¿Qué es eso que llamamos Dios?», microcharla a cargo del director de la Escuela de Filosofía a la manera clásica Nueva Acrópolis en Almería. Cerraba así el ciclo Semana de la Filosofía Activa que tuvo lugar en toda España.
Una escuela de filosofía como Nueva Acrópolis tiene el claro convencimiento de que se puede dialogar sobre cualquier tema. Platón dice en Crátilo que el nombre es un instrumento para distinguir la esencia de la idea que se maneja. ¿De dónde viene la palabra Dios? Del latín Deus, del griego Teos, en lengua ática. Los primeros dioses en Hélade son Sol, Luna, los astros, la tierra, etc. La palabra Teos indica «a la carrera», algo difícil de apresar, en continuo movimiento.
En otro sentido, la Causa del origen de lo que existe. Origen del Cosmos. Lo Uno, Aquello, elemento causal, origen de todo lo que existe. Los presocráticos hablan del Arché, del que derivan palabras como arquetipo o arqueología. La filosofía es un desvelar, Alétheya. Es un reflexionar sobre aquello que se ve para preguntarse sobre lo que no se ve.
En cada uno de nosotros hay una chispa de lo divino, de esa causa de todo. De ahí la frase de Delfos: «Conócete a ti mismo». Date cuenta de quién eres.
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