¿Quién soy?, quizás sea ésta una de las preguntas más enigmáticas y que con mayor insistencia se ha formulado el ser humano a lo largo de la historia. Y los filósofos de Nueva Acrópolis Zaragoza, no somos una excepción a esa necesidad ancestral de buscar nuestra verdadera identidad y hemos querido abordar esta cuestión.
No faltan respuestas al interrogante, aportadas desde diversas posiciones filosóficas, biológicas evolutivas, sistémicas y sociales, etc. Sin embargo, no dejamos de preguntarnos, cada uno, en nuestro fuero interno: ¿Quién soy?. Teorías no faltan, más bien, casi abruman de tanta información. Sentiremos inclinación por unas e indiferencia por otras………
Platón nos habla del “individuo” que subyace bajo la personalidad, la filosofía de la india establece un esquema septenario para describir al ser humano, otras lo hacen en cinco partes, algunas lo reducen a dos, etc.
Un estudio e investigación desprejuiciada de todos estos conocimientos nos debe llevar a encontrar elementos comunes que tengan los atributos de atemporalidad y universalidad. Quizás en esa línea de actuación nos acerquemos un poco a la verdad sobre nosotros mismos.
Aquellos seres humanos que han dedicado su vida a construir un mundo más justo y a promover la fraternidad universal, coinciden en que es precisamente la vivencia de esa entrega, del servicio a los demás, del amor incondicional; la experiencia que más se acerca a nuestra verdadera identidad.
Una gran enseñanza sin duda, la respuesta al ¿Quién soy?, está dentro de cada uno y es patrimonio de todo aquel que tenga espíritu de buscador y se comprometa con los valores morales y con el progreso civilizatorio de la humanidad.
No solo es importante saber quién soy, sino quién quiero ser, y esa es una posibilidad que todos los seres humanos tenemos. ¿Te atreves?
