¿Quién dijo que para hacer deporte hay que sufrir? Nada más lejos de la realidad. La sensación después de haber realizado un poco de deporte, recorriendo las zonas verdes y sombreadas del parque del Retiro en un día soleado, es de gran felicidad, como se puede apreciar en las caras de estos tres deportistas, que disfrutan ya de un buen momento de relax posterior al esfuerzo. Los encuentros de Running filosófico deportivo se van consolidando en nuestra escuela… Mens sana in corpore sano…