La charla taller ofrecida por Yolanda García y Leticia Darriba, con motivo del Día Mundial de la Tierra, giró en torno a las propiedades curativas de nuestro planeta y a las razones por las que se considera un ser vivo.
La conexión con la Tierra está presente en todas las tradiciones, siendo el contacto con la naturaleza una necesidad para el ser humano. Así, las diferentes civilizaciones han utilizado los cuatro elementos para la mejora de la salud. Algunos de sus beneficios son:
- Tierra: con sus alimentos nutre, tanto interna como externamente.
- Aire: nutre y purifica, el baño de aire potencia las defensas.
- Fuego: baños solares para mejorar los huesos.
- Agua: hidrata las células y regula la temperatura corporal.
Además el estar en la naturaleza mejora el sistema inmune, se tolera mejor el estrés, crea lazos de comunidad, aumenta la capacidad de imaginación…
Aunque en la actualidad se considera a la Tierra inerte y exclusivamente como fuente de recursos a la que se esquilma y contamina, hay razones por las que debe ser considerada como sagrada y como un ser vivo:
- Para muchos pueblos es una madre.
- Constatación científica de que es un organismo vivo.
- Desde fuera de la atmósfera terrestre se la ve como un ser único, una unidad.
- El universo está en evolución y la tierra del que forma parte también evoluciona.
- Está presente el principio de cooperación entre todos los seres que forman parte de ella.
Por estos motivos se alzan voces demandando sus derechos y países como Bolivia o Ecuador son pioneros en su protección legal porque se entiende que es un ser vivo.