Lao Tsé fue el compilador de la sabiduría ancestral que recoge EL TAOÍSMO y que hoy bien podemos aprovechar en nuestra vida cotidiana para encontrarnos mejor. Los pasos para andar este camino requieren: serenidad, amor, vida interior, purificación y espontaneidad.
“Un taoísta aprende y hace las cosas con amor, se olvida de sí mismo… no piensa en el éxito o en el fracaso.” El amor es una fuerza de atracción, porque el amor simplemente atrae las cosas. Cuando uno hace algo con amor, atrae lo mejor de esa cosa.